lunes, 28 de septiembre de 2009

Definiciones

Boxeo:
El
boxeo (del inglés boxing), también llamado a veces boxeo inglés o boxeo irlandés, y coloquialmente como box, es una arte marcial deportiva en el que dos contrincantes luchan utilizando únicamente sus puños recubiertos con guantes, golpeando a su adversario de la cintura hacia arriba, dentro de un cuadrilátero especialmente diseñado a tal fin, en breves secuencias de lucha denominadas asaltos o rounds y de acuerdo a un preciso reglamento.

De un modo más general, boxeo o pugilismo se refiere a un amplio género de artes marciales deportivas en las que dos adversarios se enfrentan en lucha utilizando los puños, de manera exclusiva o no, diferenciándose según sus reglas diferentes deportes como el ya mencionado boxeo inglés o boxeo propiamente dicho, el boxeo francés o savate, el boxeo chino o boxeo Shaolín, el kick boxing o boxeo japonés, el muay thai o boxeo tailandés, los antiguos pugilatos griegos como el pygmachia y el pancracio, etc.

La primera codificación de las normas que regulan los encuentros de boxeo se remonta a 1743, mientras que las reglas todavía vigentes fueron establecidas en 1889 por el marqués de Queensberry, quien entre otras cosas introdujo el uso de los guantes.

Tradicionalmente ha sido considerado como una práctica deportiva exclusivamente masculina, afectada legal y culturalmente por prejuicios de género. El reconocimiento de los derechos de las mujeres y los avances en la lucha contra la discriminación, han permitido que en las últimas décadas se registrara un auge del boxeo femenino.


Drama:
Drama (del griego δράμα, hacer o actuar) es la forma de presentación de acciones a través de su representación por actores. Suele llamarse "drama" únicamente al que incluye elementos trágicos, especialmente cuando tiene el llamado "final trágico", pero el término abarca también las obras cómicas.

De hecho, desde sus inicios en la Grecia Antigua (donde se considera que el teatro tiene su nacimiento occidental) el drama incluye la tragedia y la comedia. Posteriormente, el drama se divide en géneros realistas y géneros simbólicos; entre los primeros quedaron inscriptas la tragedia y la comedia ya existentes y, entre los segundos, el melodrama, la farsa y la tragicomedia, reconocidos como tales desde el Renacimiento.

Algunos teóricos del siglo XX insisten en la diferenciación categórica entre el Drama y el Teatro, siendo la primera la versión constituida en lo absoluto por elementos lingüísticos, formando parte entonces, de lo que se considera como género literario, siendo la particularidad de este la predominancia de la función apelativa del lenguaje, la ausencia de un mediador entre el mundo creado o realidad ficticia y el lector, su posibilidad virtual de ser Teatralizado, etc.

El Teatro sería la concreción del Drama que incluye el espectáculo, la actuación, la música, etc. Es decir, elementos que no le son propios al drama como realidad lingüística acotada solamente al discurso. El análisis de un Drama puede ser hecho desde la crítica literaria, en cambio el análisis del teatro debe incluir factores como actuación, evaluación del espectáculo, los músicos, la iluminación, etc.

Se puede añadir la precisión, desde la perspectiva de la etnoescenología,campo interdisciplinario que estudia los Fenómenos y Comportamientos Humanos Espectaculares Organizados (PCHSO) del Teatro que es un subgrupo dentro del conjunto de formas espectaculares organizadas. Se pueden distinguir tres aspectos claves dentro del análisis de una forma espectacular: la "espectacularidad" la "performatividad"; y el fenómeno de "relación simbiótica", o de "empatía" que se construye en la relación al público (Pradier, 1996).

La pertinencia de la evaluación de estos aspectos del teatro como forma espectacular, esta en el hecho que toda forma espectacular responde a un contexto social. En este aspecto, la dramaturgia, y su manifestación espectacular por medio del teatro, se organizan por medio de códigos que no son universales, pero particulares a un contexto histórico y cultural. Tobal


Tragedia:
La
tragedia es una forma dramática cuyos personajes protagónicos se ven enfrentados de manera misteriosa, inexpugnable e inevitable contra el destino o los dioses, moviéndose casi siempre (recordemos la "Orestiada" de Esquilo que tiene una reconciliación al final) hacia un desenlace fatal por una fuerza ciega, la fatalidad, el sino, el hado o fatum, anunciado siempre por diversos oráculos. Su etimología deriva de la palabra griega τράγος /"Trágos "/, es decir, macho cabrío. La traducción literal es "canto del macho cabrío", debido a que los actores que las interpretaban vestían atuendos de piel de cabra. Las tragedias acaban generalmente en la muerte o en la destrucción física, social, intelectual o moral del personaje principal, quien es sacrificado así a esa fuerza que se le impone, y contra la cual se rebela con orgullo insolente o hybris. También existen las tragedias de sublimación, en las que el personaje principal es mostrado como un héroe que desafía las adversidades con la fuerza de sus virtudes, ganándose de esta manera la admiración del espectador, como es el caso de Antígona de Sófocles. La tragedia nació como tal en Grecia con las obras de Tespis y Frínico, y se consolidó con la tríada de los grandes trágicos del clasicismo griego: Esquilo, Sófocles y Eurípides. Las tragedias clásicas se caracterizan, según Aristóteles, por generar una catársis en el espectador.